Discos: Loney, dear
Los suecos aman, pero de verdad, el sonido twee, los sesentas, las armonías vocales, el pop soleado. Quizás sea por el clima, que más de medio año se transforma en gris y frío, por lo que estos vikingos se endulzan imaginándose con manga corta escuchando las olas romper contra algún malecón, en una lejana playa de doradas arenas.
Emil Svanängen es un claro exponente de este fenomeno. Emil Svanängen es Loney, dear, un proyecto musical grabado en la intimidad de su habitación en Jönköping (Suecia). En su dormitorio, sin que nadie se de cuenta a su alrededor, es donde sucede la magia. Compone canciones frescas, melódicas, con cada elemento en su justo lugar y cada nota con un objetivo: emocionar. Sub Pop escuchó uno de sus temas e inmediatamente lo fichó. Hasta el momento todos sus cd's estaban grabados de manera muy modesta, con el micro de un minidisc y después autoeditados. Pero eso cambiará este 2007, ya que está previsto que el 6 de febrero la discográfica sueca edite "Loney, Noir" en el que encontraremos el folk (entiéndase esto como un hombre, su guitarra y sus penas) como punto de partida, pero hay más. La supernova explota y los fragmentos se proyectan por todo un universo donde hay melancolía de alto vuelo ("I am the odd one"), pop fresco como manzana recién cortada ("Saturday waits") o himnos en poplandia, ese planeta donde la melodía reina justa y soberanamente, acariciada por handclaps ("Hard days").
Mención aparte:"I am John", bella canción, heredera de la tradición sueca de hacer lo dulce aún más dulce, y la última "Sinister in the state of hope", triste a más no poder, y un final con trompetitas bacharachianas.
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